El domingo 03 de enero de 2016, en el cuerpo A del Mercurio, se publicó un artículo interesante de Margherita Cordano, sobre educación, que habla de los proyectos multidisciplinarios por sobre las clases expositivas y de la decisión de Finlandia de hacer cambios en este sentido, a su sistema educativo.

Esta lectura me lleva a la convicción de que Finlandia sigue siendo para el Kimen Montessori, un proyecto educativo inspirador que presenta muchas similitudes con lo nuestro:

En primer lugar, fomentar el pensamiento crítico y creativo, la capacidad de comunicarse efectivamente, las habilidades tecnológicas y el sentido de responsabilidad social que son las habilidades requeridas para el siglo XXI.

En segundo lugar, aprender en torno a proyectos temáticos; fomentar que los alumnos y alumnas escojan un tema, lo investiguen de forma multidisciplinaria y evalúen cómo fue su proceso de aprendizaje. Siendo el objetivo final, dejar de adquirir conocimientos aislados, además de aprender de uno y otro.

En tercer lugar, formar en habilidades tales como la resolución de problemas, la investigación y búsqueda de información, la creatividad y el pensamiento interdisciplinario.

Y por último, contar con docentes que guían y ayudan a encontrar y contextualizar la información en vez de dictar clases de manera frontal. Por ello, seguiremos enfatizando en una pedagogía activa y en un clima de trabajo que permita la colaboración entre alumnos.